Buenos dias, amanece entre sombras de mi casa y huelo la humedad de la lluvia, el sonido me hace espavilarme y preparar mi dosis cafeinica mientras intento armar de nuevo el puzzle de mi cuerpo.
A sorbos veo el dia y a los deambulantes pensando que les-nos deparara el destino, siempre sorpresas, siempre sin avisarnos.
Estos dias grises afilan sentimientos y hacen bullir ideas y recuerdos que abrimos para actualizarnos.
Lamo sin quejarme mis recuerdos y a veces sonrio y las menos eclipso aquellos que ya no tienen remedio, asi fueron, asi pasaron y asi quedaran.
Miercoles se me presenta gris pero hermoso, cae otro cafe en mi taza sonriendo a la vida, admito que es dura pero parte de la causa somos nosotros mismos.
Debemos salir y enfrentarnos a ella con esa sonrisa tatuada ya que como decian los sabios nunca hay mal que por bien no venga
Ayer entre charlas y mi desayuno de tostada de internet y google se me acerco ese negro ( digo negro por que es negro, paso de eufemismos hipocritas) que siempre me saluda con su eterna sonrisa aunque este cayendose de hambre.
Jamas, y repito, jamas ha pedido limosna o dinero a nadie y nos conocemos hace años. un gigante africano y tan sencillo como orgulloso de si mismo.
Me saca diez mil elefantes de madera tamaño llavero para que le compre algo sin insistir insistiendo, sabe que soy del gremio de seres humanos que intentar aportar sin malas ondas.
En un descuido me comenta que por unas monedas puede sacar para pagar su techo( vaya usted a saber si es solo una cama en una habitacion con 8 mas.
Rasco en mi bolsillo mientras le comento que no quiero el tallado elefantil, un par de euros emergen y sabiendo que me quedo sin opciones de mas cafe se los doy, sus ojos no entienden el gesto, y despues de decirle que se los doy como aporte a su hospedaje sin mas, mira al vacio y me responde:
Hermano, estas tallas me las envian de casa, las vendo a 4, 2 para mi y 2 para retornar como ayuda a mi gente, gracias, un poco de ti es mucho para mi.
REbusca en su bolsillo y hace acto de presencia otro elefante similar que con su semblante mas feliz me lo dona.
LO acepto, hemos hecho feliz aportando lo poco que tenemos y sintiendonos orgullosos en silencio por ello, estas mini anedoctas son las que hacen esos dias menos grises.
Me encanta estar vivo y sentirme humano, que cunda. feliz miercoles
A sorbos veo el dia y a los deambulantes pensando que les-nos deparara el destino, siempre sorpresas, siempre sin avisarnos.
Estos dias grises afilan sentimientos y hacen bullir ideas y recuerdos que abrimos para actualizarnos.
Lamo sin quejarme mis recuerdos y a veces sonrio y las menos eclipso aquellos que ya no tienen remedio, asi fueron, asi pasaron y asi quedaran.
Miercoles se me presenta gris pero hermoso, cae otro cafe en mi taza sonriendo a la vida, admito que es dura pero parte de la causa somos nosotros mismos.
Debemos salir y enfrentarnos a ella con esa sonrisa tatuada ya que como decian los sabios nunca hay mal que por bien no venga
Ayer entre charlas y mi desayuno de tostada de internet y google se me acerco ese negro ( digo negro por que es negro, paso de eufemismos hipocritas) que siempre me saluda con su eterna sonrisa aunque este cayendose de hambre.
Jamas, y repito, jamas ha pedido limosna o dinero a nadie y nos conocemos hace años. un gigante africano y tan sencillo como orgulloso de si mismo.
Me saca diez mil elefantes de madera tamaño llavero para que le compre algo sin insistir insistiendo, sabe que soy del gremio de seres humanos que intentar aportar sin malas ondas.
En un descuido me comenta que por unas monedas puede sacar para pagar su techo( vaya usted a saber si es solo una cama en una habitacion con 8 mas.
Rasco en mi bolsillo mientras le comento que no quiero el tallado elefantil, un par de euros emergen y sabiendo que me quedo sin opciones de mas cafe se los doy, sus ojos no entienden el gesto, y despues de decirle que se los doy como aporte a su hospedaje sin mas, mira al vacio y me responde:
Hermano, estas tallas me las envian de casa, las vendo a 4, 2 para mi y 2 para retornar como ayuda a mi gente, gracias, un poco de ti es mucho para mi.
REbusca en su bolsillo y hace acto de presencia otro elefante similar que con su semblante mas feliz me lo dona.
LO acepto, hemos hecho feliz aportando lo poco que tenemos y sintiendonos orgullosos en silencio por ello, estas mini anedoctas son las que hacen esos dias menos grises.
Me encanta estar vivo y sentirme humano, que cunda. feliz miercoles
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